martes, 12 de mayo de 2009

Vete...

Vete de mi, déjame extrañarte.

Vete mientras duermo para soñarte,

vuélvete realidad cada día al despertarme.

Déjame, abandóname, olvídame un instante…

Para reconquistarte.

Vete cada día, piensa que no existo

y cada encuentro siente que he llegado a tu vida

nuevamente para amarte.

Aléjate de mí, déjame en penumbras

y regresa de repente a iluminarme.

Vete entonces, ve a esconder tu amor alucinante

y en el momento preciso lo encontraré...

Para un día más amarte…

1 comentario:

Adriana dijo...

Reinventarte cada día, reconocerte el mismo pero saberte diferente, encontrar la chispa que sirva de alimento al goce y encienda la entrega del amor.